Mostrando entradas con la etiqueta Piropo a la Mujer carnavalera. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Piropo a la Mujer carnavalera. Mostrar todas las entradas

miércoles, 9 de diciembre de 2009

2000-XI PIROPO A LA MUJER CARNAVALERA




Como todos los años en fecha de Carnaval, la Peña LA NORIA, en Huelva, tiene por costumbre piropear a la mujer más Choquera y aquí estamos otro año más para cumplir con la tradición.



Cuando mi hija, carnavalera por sentimiento, de corazón y porque ese veneno le corre por la sangre, me dijo que había escuchado rumores de que yo sería el piropeador en esta ocasión, me entró una tembladera que aún siento, pero a la vez alegría, emoción y mucho miedo.

El citado rumor se confirmó y mi duda fue mayor. Acepto o no. Pero todo se disipó cuando me dijeron el nombre de la persona a la cual dicho PIROPO iba dirigido. Me sentí obligado y muy contento por ser yo el elegido.

La mujer piropeada este año es una SEÑORA, una GRAN DAMA ONUBENSE DEL CARNAVAL. ¿Quién no la conoce en este mundillo? Yo creo que por sus venas corre la sangre al compás de una guitarra y, cuando le llega al corazón, el ritmo lo marca la caja, y el bombo, el bombo le resuena tan dentro de su alma, que es el marcapasos de su vida. Pocas veces la veremos en polémicas y discusiones, pero yo, que la conozco, sé que es dura y firme en sus gustos carnavaleros. Cuando se le pregunta por una agrupación o evento de esta fiesta, no tiene temor por decir lo que piensa. Para ella la verdad no ofende.

Su vida carnavalera ha tenido de todo un poco, mucha emoción, tristeza, alegría, horas muy bajas, días de nervios incontrolados, amargura extrema, minutos de ansiedad y, algunas veces, segundos de gloria. Pienso, como todos nosotros, que tantas vivencias marcan a una persona y es por ello que el Carnaval ha calado y penetrado tan hondo en la persona de … (pues no me acuerdo del nombre), que dificilmente puede haber divorcio o separación entre ella y esta hermosa Fiesta.

Ella es hoy piropeada, por su colaboración desinteresada en nuestro CARNAVAL COLOMBINO; colaboración a veces en la sombra, como buena esposa y ejemplar madre, par que otras personas pudieran brillar para siempre igual que las estrellas en el firmamento. También tengo que decir que se la ha visto con los dos antifaces de esta fiesta, el de la alegría y el de la tristeza, sin habérselos puesto. Ella no es amante de las caretas, pero la vida no transcurre como uno quiere, sino como DIOS dispone.

Su familia, CARNAVALERA; a la cual ella siempre responde con un SI, un apoyo y una dedicación por entero, suele asistir a todos los eventos de esta fiesta. Me parece que su marido … (no me acuerdo cómo se llama) ha cantado o le han cantado en este Carnaval. Yo sé que, carnavalero de profundas raíces, esté donde esté, sus amigos, y yo soy uno de ellos, lo apreciamos de corazón y, en las tertulias carnavalescas, suele aparecer su nombre, casi siempre para bien. Él ha marcado una etapa, que este mundillo recordará siempre.

De sus hijos o hijas (que tampoco recuerdo si son niños o niñas), decir que viven y sienten el Carnaval desde su infancia. Yo les he visto desafinar guitarras, martillear la caja, aporrear el bombo, hacer ruido con el pito de caña, interrumpir conversaciones, … Qué más se les puede pedir… ¡Ah! Si, sentarse en una silla mirando y escuchando atentamente la agrupación de turno y, luego, echarse a dormir en un rincón del cuarto de ensayo.

Tantas vivencias carnavaleras hacen que esta GRAN DAMA ONUBENSE, le tenga un enorme afecto y sincero apego a esta fiesta, que sin duda para ella es la más esperada y ansiada del calendario.

También tengo que decir que todo en la vida no es de color de rosa. Yo mismo he tenido diferencias, carnavaleras por supuesto, con ella, pero estas han sido siempre sobre la marcha. El tiempo pasa y con él se van las discusiones tontas que no tienen importancia.



Pero ¿quién en este Carnaval no ha tenido ningún roce, ninguna polémica? Por mi parte hoy es otro día en el cual me alegro de estar vivo y presente en este homenaje y reconocimiento, que la HUELVA CARNAVALERA hace a esta SEÑORA, GRAN DAMA, MUJER ONUBENSE, CHOQUERA POR LOS CUATRO COSTADOS, a … MARIA PAREDES ROBLES, esposa que fue de PEDRO, EL DEL BOMBO, EL BOMBO DEL BOQUERÓN para la eternidad, y MADRE de Mari Ángeles y Alicia, Damas de Honor del Carnaval Colombino y de Ana Belén, que fue elegida CHOQUERA en el año 1.999.

Qué más se puede pedir a esta persona, su aportación al Carnaval Onubense es una muestra de generosidad, cariño y saber estar. Sus esfuerzos, que algunos le habrán costado, dan muestra de una constancia y sacrificio, que a muchos nos falta. A todos los que queremos a esta bendita fiesta, MARIA PAREDES, nos ha demostrado que, con la careta de la alegría y con la careta del dolor, se puede estar al pié del cañón. Ella ha sabido apoyar, defender, luchar por nuestro carnaval, desde su posición de ama de casa, con una bandera AZUL Y BLANCA muy alta, siendo un ejemplo carnavalero, que quedará en nuestros corazones, en nuestras vidas y en el Libro de Oro del Mejor Carnaval del Mundo, que es el nuestro.

¡¡VIVA EL CARNAVAL!!


¡¡VIVA EL CARNAVAL COLOMBINO!!


¡¡VIVA HUELVA!!

Le doy las gracias a la Peña LA NORIA por confiar en mí y haberme dado la oportunidad de gozar este día junto a mi familia.

Gracias a todos.







Si hay que coger el bombo...
Que sea PEDRO quien lo toque


Si hay que elegir una flor...
Mari Ángeles es su nombre

Si se busca un perfume...
Alicia lo representa

Pero si es Ana Belén...
Huelva la eligió CHOQUERA

En ti, MARIA PAREDES,
Dios puso el Carnaval.
Que los tiempos no marchiten
RAIZ Y SEMILLA, jamás.





Flore Giraldo Cárdenas. Carnavalero.

9 de Marzo de 2.000
Peña LA NORIA

martes, 2 de diciembre de 2008

1995-VI PIROPO A LA MUJER CARNAVALERA


PROLOGO


Una vez más, en el preámbulo de cada año, consume la Noria un nuevo giro, para detenerse en este loco mes, al que le dicen "Febrerillo". Y de todos los canjilones de sus paletas, bien afianzados con sobria maromas, apéense todas las ilusiones, todo el saber ser, dar y entregarse con los brazos abiertos a la gente y a la tierra a que pertenece.

Hoy, aquello que surgió a guisa de ensayo, cumple su sexta edición, y lo que se fuere a llamar certamen, es ya una tradición. Porque el tiempo, a mis palabras, las llena de razón.

Así pues, en esta grata tarde, a caballo con la noche, la serpenteante pluma del poeta, se debate entre el papiro y las ideas, para exaltar a modo de pregón; un piropo al viento. Humilde, aunque altanero. Galán, pero sincero. Adulante y con talante, a la mujer portadora de los aires que embriaga a esta Onuba de la mar hasta el Conquero.






PRESENTACION DE LA PIROPEADA

Primero fue...solo una máscara y una sonrisa, las que vistieron nuestras calles, y allí, tras la máscara, ella era dueña de aquella sonrisa. Una sonrisa blanca y sincera, que a lo largo de trece sin par carnavales, ha lucido como bandera y la ha hecho especial carnavalera, por su estilo y sus maneras.

En aquellas primerizas singladuras, pionera fue como el que más, y al son del bombo y la caja bailaba los pasa-calles sin parar. Fiel amante de aquel viejo y maltratado, por el tiempo, pero entrañable y sin igual Gran Teatro. Acudía a su cita, a ese idilio de enamorados, cada día, cada año. Sus vítores e ilusiones quedaron atrapados por los rincones del teatro; en el calor del escenario, en los aplausos de la bombonera,en las prisas de los camerinos, en los nervios de los pasillos, en los ánimos desenfadados del gallinero, en las sombras de los palcos...confundidos con los ecos de las chispas de las chirigotas, la gracia de las murgas, la elegancia y el coraje de las comparsas, y las risas de los cuartetos.


Su corazón carnavalero, fue desbordando pasión, y donando parte de el, fue dando vida al Carnaval con nuevos amigos de Febrero. Contagiados sin duda por el espíritu alegre y afanoso de nuestra piropeada.

Hechizada por la magia de los papelillos y las serpentinas, tomó parte de la carga de estas fiestas, y deambuló como nómada errante con su trabajo al hombro; del frío Estrada, al candente Palacio del Carnaval, y del antiguo Rábida, al estrepitoso ruedo, para volver con la llama del dios Momo, a la casa tan esperada, el rejuvenecido Gran Teatro, que abría sus puertas a los hijos de la mascarada como antaño.

Su simiente es herencia para toda Huelva, de una saga carnavalera que maquina todo una año, para arrancarle la risa a Febrero.

Amiga del amigo, amiga del buen gusto, amiga de sus hijos y de su marido.
Enemiga de la falsa, enemiga del conflicto, enemigos no conoce, porque sabe hacer amigos.
Su coraje y su temple, rivalizan con su amable dulzura. Lo mismo pone las cosas en su sitio , que una vez puestas, de mimos engalana y satura.

Adivina adivinanza; ¿Quién será la dama carnavalera?.
-Tal como decía una tal Rafaela...-
Si fuera una flor, sería...margarita marismeña, con fragancia y esencia de sal, tomillo y romero, de esta tierra marinera.

Adivina adivinanza; ¿Quién será la dama carnavalera?.
Si fuera un animal, sería...paloma brava, blanca de paz y majestuosa en su vuelo, desde Fuentepiña hasta el muelle pesquero.

Adivina adivinanza; ¿Quién será la dama carnavalera?.
Si fuera un personaje histórico, sería...Juana la Loca, más que por Juana por loca...y de verdad, enamorada de Huelva, loca de atar.

Si fuera, si fuera, si fuera...
Si es una dama, no es por decirlo, sino porque es una señora, y si es carnavalera, es porque lo ha demostrado. Como soy persona clara, no quiero lanzar mis piropos sin mirarte a la cara, por eso solicito que a mi lado venga nuestra piropeada; ¡Dama!, ¡Señora!, ¡Carnavalera!...ella es...María, María González Carrasco, nuestra Mary González.






PIROPO A MARY GONZALEZ

Es Huelva balcón del mar,
gitanillas sus mujeres,
esencia de flor y sal,
cautivo de tus quereres.

Son requiebros de un poeta
lo que mis labios susurran,
corazón de puerta abierta
al amor que no se cura,
a dos damas tan coquetas;
Huelva y mujer...mi locura.

Dulce fresa es su boca,
caramelo sus palabras,
hembra que pasión desboca
con su magia, abracadabra.
Cuando aledaño convoca
a los hombres como cabras.

Es Huelva balcón del mar,
gitanilla sus mujeres,
esencia de flor y sal,
cautivo de sus quereres.
Todas ellas son amor,
un jardín de enamorados,
por quién se vuelve cantor
las mojarras y los sargos,
por quién suspira su ardor
hasta la flor del naranjo.

Garbo y finura al andar,
tacón que rompe silencios,
de día y de "madrugá",
arrancando del más recio
un piropo al pasar,
y al listo...lo vuelve necio.

Es Huelva balcón del mar,
gitanillas sus mujeres,
esencia de flor y sal,
cautivo de sus quereres.

Cuando cantan son sirenas,
las olitas; la acompañan
meciendo a ritmo y serenas,
cada quilla, cada barca
y te arrancan "toas" las penas,
cuando el son a ti te atrapa.

De aquellas cosas sencillas
pierdensé en filosofía,
y aunque en blanco a "tos" nos pillan,
percatas sabiduría
y los ojos a ellas brillan...
cuando notan tu ironía.

Es Huelva balcón del mar,
gitanillas sus mujeres,
esencia de flor y sal,
cautivo de sus quereres.

Choquera; encaje y tronío,
lunar, mantilla y volante.
De peineta y poderío,
de la gracia y del arte.
Yo defiendo lo que es mío
y al que sea...por delante.

Que no hay cosa más bonita
por su boca y por su andar,
que no hay cosa más bonita
por su habla y su cantar,
que no hay cosa más bonita
que poderla piropear.

Es Huelva balcón del mar,
gitanillas sus mujeres,
y hoy María tu serás,
bella rosa entre claveles.





Piropeador: Blas Miguel Hernández Finch
Peña Carnavalera La Noria / Huelva, 28 de Febrero de 1.995

Archivo del blog