Termina el mes de Enero y llega ese tiempo que los carnavaleros y carnavaleras llevan un año esperando. La llegada de una celebración que es mucho más que una fiesta: un encuentro con la tradición, con la cultura, con forma de ser y expresarse de tantos pueblos y ciudades de nuestra geografía.
Vuelven las noches de comparsas y chirigotas al Gran Teatro, donde el tiempo se suspende para escuchar esa forma de narrar la vida y de desgranar sus alegrías y penas que solo saben hacer las agrupaciones. Regresa la alegría y el color de la Cabalgata, las mascaradas, el Entierro del Choco y la lluvia de momentos únicos que Don Carnal dejará a su paso.
Es el momento de valorar y disfrutar el esfuerzo y el trabajo de la FOPAC durante todo el año. Un trabajo que tendrá su mejor recompensa, una vez más, en la respuesta y en la participación de los onubenses en todas las actividades organizadas para la que estoy seguro que será una gran edición del Carnaval Colombino.
Porque si algo caracteriza a estos días es el deseo de celebrar la vida, de expresar libremente la crítica, la denuncia, de hacer apología de la diversión y enarbolar la bandera del humor, tan necesario en estos tiempos, para que brille por encima de la rutina y los desencantos. A ritmo de tres por cuatro Huelva recibe una de sus grandes fiestas, que cada año cobra más fuerza entre sus gentes, confirmando que forma parte de la idiosincrasia del pueblo onubense.
En los municipios de la provincia de multiplican las manifestaciones de esta celebración única, que no conoce fronteras ni diferencias y que como un lenguaje universal, hace que el invierno sea más cálido en nuestros corazones.
Solo me queda desearos que disfrutéis con ilusión de todo lo que esta edición del Carnaval Colombino os tiene preparado. Que la magia de la fiesta os acompañe hasta el miércoles de ceniza.
Ignacio Caraballo
Presidente de la Diputación de Huelva
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